Complicaciones del embarazo
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El embarazo es un momento especial en la vida de una mujer y conlleva una serie de cambios en su cuerpo. Estos cambios van desde los esperados y ampliamente conocidos, como el aumento de peso y la retención de líquidos, hasta algunos poco conocidos y comprendidos, como los cambios en la visión. A grandes rasgos, los cambios que se producen en el cuerpo de una mujer son cambios hormonales, cambios de peso y cambios sensoriales.
Las mujeres embarazadas experimentan aumentos repentinos y extremos de progesterona y estrógenos, que son las principales hormonas del embarazo. Estas hormonas permiten que el útero y la placenta mejoren la vascularización y aporten nutrientes al bebé en crecimiento. Estas hormonas son las responsables del “resplandor” del embarazo y pueden alterar el impacto del ejercicio y la actividad sobre el cuerpo. Aflojan los ligamentos, lo que aumenta el riesgo de esguinces y distensiones musculares. Las hormonas también provocan un aumento del tamaño de los senos y un cambio en la curvatura de la espalda de la mujer, lo que altera su sentido del equilibrio.
El aumento de peso incrementa la carga de trabajo que supone para el cuerpo cualquier actividad. t ralentiza la circulación sanguínea y de fluidos, especialmente en la parte inferior del cuerpo. Como consecuencia de ello, el cuerpo de las embarazadas tiende a retener líquidos y provoca hinchazón de las extremidades, sobre todo de la cara. Se recomienda que las mujeres embarazadas eviten estar de pie durante mucho tiempo, eviten la cafeína y el sodio que aumentan la retención de líquidos, aumenten la ingesta de potasio y eviten cualquier esfuerzo excesivo de su cuerpo.
Cambios corporales durante el embarazo
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El embarazo es una época de cambios para todos: la madre, el bebé, la pareja y las relaciones. Desde la concepción hasta el nacimiento de su bebé, su cuerpo experimentará una emocionante transformación. Los niveles hormonales cambiantes son responsables de muchos de los cambios físicos y emocionales que experimenta durante el embarazo. Estos cambios pueden comenzar y detenerse en distintos momentos del embarazo. La mayoría de estos cambios se resuelven después del parto.
Durante el segundo trimestre, los niveles hormonales se igualan, disminuyen las náuseas y aumenta la sensación de bienestar. Empezarás a notar cambios en la forma y el tamaño de tu cuerpo. Puede tener dolores de espalda y articulaciones. Es posible que aparezca una línea marrón en el centro del vientre y marcas marrones irregulares alrededor de los ojos, la nariz y las mejillas.
Cómo cuidar a una mujer embarazada
Aproximadamente seis días después de la fecundación, el óvulo fecundado llega al útero para anidar en él. Una parte de las células dará lugar a la placenta y la otra, al embrión. En ese momento se producen cambios en el cuerpo de la mujer. ¿Qué le está pasando a mi cuerpo?
Aparecen signos particulares como el oscurecimiento de los pezones, podrás notar una línea en medio del abdomen que se oscurece poco a poco, aparece debido a los niveles hormonales que desencadenan variaciones de la melanina, responsable de la pigmentación de la piel. Después del parto desaparecerá con el tiempo.
Estamos en la recta final y tu bebé crece cada día más, puedes notar claramente el cambio en el tamaño de tu abdomen casi de un día para otro. ¡Tu bebé empieza a colocarse en posición para recibirte!
Sea cual sea el método que tú y tu pareja hayáis elegido para traer a vuestro bebé al mundo, queremos desearos lo mejor, podéis hacerlo, confiad en vosotros mismos en todo momento. Sabemos que los cambios pueden ser complicados, pero se resumen en una espera con amor que has anhelado y deseado durante todo este proceso, tu fuerza y energía son vitales. Admiramos tu valentía y fuerza para atravesar esta increíble etapa.
Cambios que sufre el cuerpo durante el embarazo 2022
Es seguro decir que crecer y dar a luz a un bebé hace “algunas cosas” al cuerpo. Y aunque muchos de esos cambios son temporales, como las extrañas afecciones cutáneas que se experimentan durante el embarazo, otros pueden ser más permanentes, como la alteración del ADN.
Más allá del crecimiento de un órgano completamente nuevo (hola placenta) y de la reorganización de bastantes otros, del bombeo de un 50% más de sangre, de la creación de una fábrica de leche y de otras innumerables y asombrosas proezas del embarazo, he aquí algunos de los principales cambios que experimentan las mamás y la ciencia que hay detrás de ellos.
Como hogar oficial del bebé y la placenta durante el embarazo, el útero experimenta una enorme transformación en el transcurso de 40 semanas: se estira hasta 500 veces su tamaño normal y aumenta 16 veces su peso normal. Para ello, el cuerpo tiene que aumentar el número de fibras musculares, vasos sanguíneos y nervios en toda la pared del útero. También bombea las hormonas relaxina y progesterona para relajar el útero y que pueda estirarse y evitar cualquier calambre o contracción hasta el parto. En cuanto sale el bebé y la placenta, las hormonas pasan a contraer el útero para que vuelva a su tamaño normal, lo que tarda entre seis y ocho semanas.
